CARACAS.- El alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, fue imputado por los cargos de conspiración y asociación para el delito y fue recluido en la cárcel para procesados militares de Ramo Verde, donde se encuentra desde hace un año preso el dirigente opositor venezolano Leopoldo López, confirmó la Fiscalía General.
La Procuración aseguró que tribunal sexto de control de Caracas ordenó la noche del viernes que Ledezma, de 59 años, sea recluido en la cárcel de Ramo Verde, en la ciudad vecina de Los Teques, donde aguardará el inicio de la causa.
Ledezma fue detenido el pasado jueves por un comando de agentes de seguridad que irrumpió en sus oficinas y dirigentes de oposición dijeron que fue golpeado y vejado en el procedimiento.
Durante la audiencia judicial realizada el viernes, los fiscales Katherine Harington, Yeison Moreno y José Orta imputaron al alcalde los cargos de conspiración y asociación para el delito.
La Fiscalía informó que los cargos están previstos y sancionados en el código penal y la Ley contra la Delincuencia Organizada y Financiamiento al Terrorismo. El jefe opositor fue acusado por el presidente Nicolás Maduro de estar conspirando contra su gobierno, luego de la publicación de un manifiesto que firmó con López y la ex diputada María Corina Machado, en el que planteaban un gobierno de “transición” para enfrentar la crisis económica del país.
Luego de ser detenido, Ledezma fue llevado a la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), desde donde fue trasladado la noche del viernes a la audiencia del tribunal.
La oposición venezolana advirtió que la detención del alcalde es un golpe de Estado desde el Gobierno contra la voluntad popular, pues Ledezma fue reelegido en 2013 por más de 700.000 votos en cinco municipios de la zona metropolitana. La opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD) rechazó la acusación y calificó la detención del regidor como un “golpe propinado desde el Estado, contra la institucionalidad democrática”.
Maduro dijo que Ledezma será enjuiciado por conspiración, pues afirmó que el manifiesto que suscribió era la “mecha” de un supuesto intento golpista que fue develado la semana pasada. Y afirmó que existe una “conspiración permanente” contra su gobierno desde España, Estados Unidos y Colombia, con el objetivo de que la llamada revolución bolivariana fracase, pero no ha mostrado pruebas contundentes. Todos los gobiernos han rechazado esas acusaciones.
“En Venezuela no hay intocables”, sostuvo el sucesor del líder bolivariano Hugo Chávez, durante un acto público. “Todo el que se meta a golpista lo esperará la justicia, llámese como se llame”, agregó.
Según la Fiscalía, el caso de Ledezma está vinculado con el de varios estudiantes detenidos en Colombia y extraditados a Venezuela el año pasado, quienes ahora enfrentar cargos de presuntos planes conspirativos.
El líder del grupo, Lorent Gómez Saleh, aparece en videos en los que manifiesta su intención de atentar contra edificaciones públicas y privadas, a fin de causar alarma y caos en el país.
López, dirigente del partido opositor Voluntad Popular -uno de los más radicalizados políticamente-, es enjuiciado por supuesta instigación de las protestas del año pasado contra el gobierno, que entre febrero y mayo dejaron 43 muertos y cientos de heridos.
Por años, la oposición y diversas organizaciones de derechos humanos del país, pero también internacionales, han denunciado la existencia de presos políticos en Venezuela, pero el Gobierno chavista lo ha negado rotundamente asegurando que en el país sólo hay “políticos presos”. (DPA-Reuters)